Antes de nada: lo sabemos. Llevamos más un mes sin aparecer por aquí. Demasiado tiempo. Les debemos mil disculpas. Aunque como saben, siempre pueden pasarse por nuestro blog más personal, donde dejamos cosas más a menudo. Andamos en plena preproducción del cortometraje y MENÚ EQUIVOCADO (rodamos en tres días) y hemos dejado durante unos cuantos días que el trabajo hecho en DOMINGUEROS madure para retomarlo de nuevo más tarde.
Si el autor de Psico o Vertigo nos viese en este apasionante embolao, se volvería a su lecho nada más salir. No solamente le hicimos un homenaje en nuestro paradocumental Los Pájaros 2, sino que hemos desobedecido su famosa máxima de no rodar nunca con niños o animales. Como saben, en DOMINGUEROS hay niños. Niños pequeños, de los que apenas hablan, y niños más grandes, de los que no paran de hablar. Adolescentes repletos de hormonas, niñatos repelentes y hasta algún crío simpático y cabroncete. Pero eso no es todo. Ahora es cuando Alfred nos grita llamándonos insensatos. Hemos fichado a nuesta próxima estrella. Tiene planos propios, su pequeño protagonismo y su club de fans no para de crecer. Se le está subiendo a la cabeza. Ya nos pide camerino propio. Pero claro, con esos ojazos, a ver quien le dice que no...
