El cine es un arte que se hace por aproximación. No conseguimos recordar quien escribió o dijo eso, pero nos viene a la cabeza cada vez que tenemos que adaptarnos (y adaptar DOMINGUEROS) a nuestra realidad.
Cada vez que ustedes van a un restaurante pueden elegir entre varios platos, según les apetezca. Pueden guiarse por el nombre del plato, por una recomendación o un antojo de última hora. Hasta ahí todo normal. Una decisión y un riesgo. Ahora imaginen que, además de tener hambre, recuerdan aquella deliciosa paella que hacía su tío los domingos o el rico arroz con leche de la abuela. Y se dedican a buscarla una y otra vez, restaurante tras restaurante, intentando reencontrarse con aquella sensación de la infancia...Algo imposible. No hay dos cocineros iguales, ni dos actores iguales. Es más: aunque volviésemos a probar el mismo plato, no nos sabría igual. Ha pasado tiempo, nosotros hemos cambiado y esa sensación estará idealizada.
Algo así nos pasa. Ya les comentamos hace tiempo que DOMINGUEROS es una tv-movie bastante peculiar. Está escrita, coproducida y dirigida por las mismas personas (algo más propio del cine). Además, tampoco cuenta ningún hecho histórico o social relevante, ni tiene un mensaje social adoctrinador evidente. Otra cosa será para quien sepa leer entre líneas...
Algo así nos pasa. Ya les comentamos hace tiempo que DOMINGUEROS es una tv-movie bastante peculiar. Está escrita, coproducida y dirigida por las mismas personas (algo más propio del cine). Además, tampoco cuenta ningún hecho histórico o social relevante, ni tiene un mensaje social adoctrinador evidente. Otra cosa será para quien sepa leer entre líneas...
La primera vez que presentamos el proyecto de DOMINGUEROS lo hicimos como "una cariñosa venganza contra nuestras familias". La mayoría de los personajes -al igual que en series míticas actuales como Los Soprano o Me llamo Earl- están basados en los tíos, abuelos y primos de los autores. Personas de carne y hueso. Seres reales. Nuestras familias.
Así es normal que, teniendo una idea tan clara de los personajes, debamos , no sin cierto dolor, adaptarnos a la realidad. Es preferible un actor talentoso aunque no se parezca a tu abuelo, o una niña más dócil y dúctil aunque no tenga nada que ver contigo cuando eras pequeña. Nuestra parte más creativa y libre debe convivir con la más prágmática y fría para intentar que DOMINGUEROS quede lo mejor posible.
Una última cosa: aunque DOMINGUEROS esté basado en nuestras familias y tenga algo de biográfico, no se equivoquen. No es la historia de nuestras vidas. No nos miramos al ombligo. Olvídense de los tópicos. DOMINGUEROS es una peli tremendamente actual, con el principal objetivo de entretener y con un punto de vista moderno y fresco. Queremos alejarnos de cualquier atisbo de caspa. Ya lo comprobarán.
